Un cultivador y usuario de cannabis terapéutico fue retenido temporalmente por la Policía Caminera de Entre Ríos este lunes, mientras volvía de Buenos Aires tras haber asistido a la Expo-Cannabis. Se trata del paranaense Ivan Malajovich, emprendedor de la tienda de cultivo El Esqueje Grow Shop, quien está procesado por “cultivo, guarda de semillas y tenencia de estupefacientes” desde 2018.
“Estábamos volviendo de la Expo-cannabis con un amigo de Neuquén y veníamos re tranqui en el auto llegando a Paraná, contentos porque habíamos tenido un viaje super placentero, sin controles y sin ningún susto”, aseguró Iván en diálogo con MATE. Malajovich cuenta con el certificado REPROCANN desde mayo de este año. Cuando los viajeros llegaron al control del cruce, la Policía Caminera les indicó que tenían que parar a un costado.
Dentro del vehículo había mercadería que había sido comprada en la Expo y estaba destinada a ser vendida en el grow. Al ver los productos, la policía pidió ver los remitos que comprobaban la compra. “Cuando abrí el baúl le mostré unas macetas y en eso el policía ve una bolsa publicitaria del banco de semillas Dutch Passion, que entregaban en la Expo, y me pregunta “y la chala de la bolsa por qué es?”, Explica Ivan y sigue:
—Es una imagen publicitaria de un banco de semillas
—¿Y ustedes consumen marihuana?
—Sí, consumimos marihuana.
—¿Y tienen acá?
—Si, tengo la cantidad de marihuana que estoy permitido portar porque estoy registrado en el programa REPROCANN.
A pesar de tener impresos los permisos del REPROCANN, los cultivadores podían oler la actitud desconcertada del policía, que sin saber qué hacer, decidió llamar a un superior.
La excusa para no dar validez a los certificados fue que “ellos no podían comprobar de ninguna forma si eran documentos reales o falseados”. Una buena opción podría haber sido mostrarle los permisos a través de la app Mi Argentina, pero como sucede a muchos usuaries registrades, el certificado REPROCANN no aparecía en la cuenta de Malajovich.
“Tenía la credencial y el registro impresos, de hecho pueden leerse por un código QR, así que le mostré eso al policía. Después de consultar a un superior nos pidió que le mostremos la marihuana que portábamos. Finalmente decidieron llamar a la Dirección de Toxicología, porque ellos no sabían cómo proceder”.
Ante la necesidad de verificar si los viajeros portaban “otras drogas”, desde Toxicología trajeron a un perro para que olfateara la camioneta y la mercadería. “Nos preguntaron varias veces si teníamos otras drogas, o el valor comercial en el mercado de esa cantidad de marihuana que teníamos, también preguntaron si la comprábamos o la cultivábamos, y a quién se la habíamos comprado. Parecían preguntas propias de alguien que te quiere hacer pisar el palito” detalló Iván.
El personal de Toxicología tampoco conocía el REPROCANN y la excusa fue que ellos tampoco podían leer el QR desde sus celulares porque “les saltaba error”, por lo cual “no tenían forma de validar que el certificado era original”. Seguidamente empezaron a preguntar por el médico que le había indicado cannabis: su nombre, su teléfono, la razón por la que se lo había indicado, cómo había tenido la entrevista con el médico y si había sido virtual o presencial, entre otras cuestiones.
“Nos discutían y argumentaban que eso no servía para la provincia porque Entre Ríos no estaba adherida al decreto de la ley que habilita el REPROCANN. Nosotros siempre mantuvimos la calma y optamos por la vía de la explicación intentando hacerlos entrar en razón”.
Por su parte, Gustavo Gabbi en representación de la Agrupación Paranaense de Agricultorxs Cannabicxs opinó para MATE que “es evidente la cantidad de casos que sigue habiendo de cultivadores y cultivadoras que están inscriptos en el registro del programa REPROCANN, que se encuentra en plena vigencia, y aún así es desconocido por las fuerzas de seguridad. Creemos necesario interpelar a la autoridad de aplicación de la ley, el Ministerio de Salud Nacional, para que por lo menos articule con el Ministerio de Seguridad o con las fuerzas de seguridad en general, para llevar a cabo las formaciones de concientización pertinentes o un repaso del estatus legal de regulación de la planta que rige actualmente en el país”.
Crónica anunciada
El asunto derivó en la llegada del Fiscal Auxiliar que estaba de turno, Santiago Alfieri. Éste a su vez llamó al abogado Andrés Bacigalupo, coordinador del comité de Redacción de la Ley de Acceso al cannabis medicinal en Entre Ríos, para preguntarle cómo era el proceder frente a esta situación.
MATE obtuvo precisiones por parte de Bacigalupo, quien aseguró: “no pude asesorar al fiscal porque no vi a tiempo su llamado. Me terminé enterando después, porque me llamó nuevamente para avisarme que lo había podido resolver interiorizándose con la Ley 27.350 y el decreto reglamentario que crea el REPROCANN, a través de internet”.
El abogado detalló que cuando el Fiscal pudo explicarle a la Policía Caminera que Iván podía circular tranquilo por estar inscripto en el registro REPROCANN, rápidamente se resolvió la situación.
“Transcurridas unas dos horas, la policía se acercó con la marihuana, los papeles y documentos que nos habían sacado, nos devolvieron todo, nos pidieron perdón por la demora y nos dejaron seguir como si nada”, comentó Malajovich sobre el final.
“En Entre Ríos tenemos una ley provincial que está sancionada pero no reglamentada, en la que existe un artículo específico que busca garantizar las capacitaciones a fuerzas de seguridad y poder judicial. También tenemos el ejemplo de Santa Fe, donde recientemente se publicó una circular que se sacó desde la Jefatura de Policía de la provincia, advirtiendo a todas las dependencias que no pueden allanar o llevar detenidas a las personas que estén inscritas en REPROCANN”, recordó el integrante de APAC.
Esta noticia se publicó también en Mirador Provincial.
