La Revista Argentina de Salud Pública publicó este mes un trabajo titulado “Cocaína adulterada con opioides en la Provincia de Buenos Aires: Análisis epidemiológico para pensar una nueva política de drogas”. El objetivo de este trabajo fue describir la población afectada, las acciones realizadas desde el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires y analizar las modalidades de abordaje de los consumos en la Argentina.
El estudio fue realizado por Ariel Parajón, Especialista en Política de Drogas; Clarisa Baez, Especialista en Epidemiología; Ana Laura Barrio, Mag. en Epidemiología, Gestión y Políticas de Salud; Romina Natalia Forlani, Lic. en Psicología; Samanta Sofía Díaz Menai, Médica; Agustina María Edna D´Agostino, Dra. en Psicología y Teresa Beatriz Varela, Especialista en Epidemiología y Pediatría. Algunxs de lxs autorxs son trabajadorxs del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires.
La tragedia
El 2 de febrero de 2022, por la madrugada, en diferentes guardias del sistema de salud pública de la PBA, fueron atendidas personas con signos de shock, dificultad respiratoria y excitación psicomotriz; todas ellas con el antecedente común de consumo reciente de cocaína.
Por la magnitud de la problemática, se consideró la existencia de una fuente común de intoxicación. A partir del contacto inmediato del Centro Provincial de Toxicología (CEPROTOX) arribó a un diagnóstico presuntivo de intoxicación con opioides.
A través del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires se consiguieron muestras de la sustancia consumida, que fueron derivadas para un análisis. Su resultado confirmó que la sustancia era cocaína con carfentanilo, un opioide que puede llegar a tener efectos 10,000 veces más potentes que la heroína.
Principales resultados del estudio
- El Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires recibió reportes por un total de 253 personas afectadas y 24 fallecidas.
- El sistema de salud pública atendió 124 personas afectadas y registró 19 fallecidas, se analizó este universo de personas.
- La totalidad de la población estudiada tiene residencia en la PBA (en el AMBA). Los municipios con mayor cantidad de residentes afectados fueron Hurlingham (41), General San Martín (29), Ituzaingó (16), Moreno (12), Tres de Febrero (10) y otros (16).
- El rango de edades de las personas afectadas fue de 18 a 57 años, y el grupo etario de 28 a 37 años concentró la mayor cantidad de casos.
- El 84.5% fueron informados como sexo legal masculino (104).
- El 66% requirió internación en Unidad de Terapia Intensiva (UTI) o sala general (82).
- Un total de 19 personas fallecieron: 14 hombres y 5 mujeres. Las edades de las personas fallecidas fueron de 21 a 57 años (media de 35 y mediana de 33).
- No se registraron oficialmente personas afectadas menores de 18 años.
Mortalidad por sobredosis de opioides: Una epidemia de tres olas
En la consulta con expertos en la temática, principalmente de Estados Unidos y Canadá, se planteó lo que se conoce en esos países como una “epidemia de tres olas”, delimitadas temporalmente por el aumento de la mortalidad relacionada con sobredosis de opioides y sus respectivas causas.
- Una primera ola, con inicio en el año 2000, se produjo por el aumento en la prescripción médica de opioides para el tratamiento del dolor y el posoperatorio. Fue impulsada por las grandes compañías farmacéuticas, favorecidas por la presencia de vacíos legales en la regulación sobre el uso de opioides.
- La segunda ola se presentó hacia 2007 y se caracterizó por un veloz aumento de sobredosis asociadas al uso de heroína. Tuvo como protagonistas a personas que habían iniciado el consumo de opioides a través de pastillas recetadas y que, al volverse más compleja y costosa su adquisición por prescripción, se volcaron rápidamente al consumo de heroína de elevada pureza y más económica. Se constituyó así una gran proporción de nuevos usuarios, que iniciaron sus consumos a través de la heroína.
- La tercera ola comenzó hacia 2013 y marcó la aparición de los opioides sintéticos y el aumento de las muertes relacionadas con su uso. Motivados por el régimen internacional que regula los mercados de drogas desde una perspectiva prohibicionista, estos compuestos son sintetizados en laboratorios a partir de distintos precursores y modificados constantemente para mantenerse dentro del mercado y por fuera de las reglamentaciones. Esto los hace aún más impredecibles en sus efectos, lo que aumenta los riesgos en salud para lxs usuarixs y expone a mayores tensiones la atención de los sistemas sanitarios.
En la caracterización de esta última ola, lxs expertos consultados refirieron reconocer un gran parecido con el evento estudiado. La forma de aparición de los opioides en el mercado fue similar a la acontecida en los mencionados países, donde se introdujo como adulterante de otros estupefacientes con el propósito de aumentar el nivel de dependencia física a la sustancia, sin consentimiento ni conocimiento de este hecho por parte de lxs usuarixs, lo cual dificulta la posibilidad de intervenir efectivamente en la situación y administrar el antídoto correspondiente.
En este aspecto, resaltaron la importancia de capacitar al personal de salud asistencial en el reconocimiento de los cuadros clínicos agudos, producto del consumo de estas sustancias, así como de equipar a los efectores de salud con los insumos necesarios, principalmente naloxona (de fácil acceso y disponibilidad), para poder atender a lxs pacientes que presenten dichos cuadros, alertando que podría esperarse un aumento progresivo de casos.
Una alerta epidemiológica del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires
Aunque Argentina creó un Sistema de Alertas Tempranas (SAT) en 2016, sus alertas no fueron difundidas públicamente y actualmente no está en funcionamiento. Un SAT es una red multidisciplinaria e interinstitucional que trabaja para detectar e identificar tendencias de las nuevas drogas sintéticas para guiar políticas basadas en evidencia y posibilitar respuestas oportunas, entre las que se encuentra la difusión de alertas.
Este organismo podría tener un rol clave en la articulación y difusión de información sobre sustancias adulteradas, para alertar a usuarixs y al sistema de salud. En este contexto, resulta destacable la decisión del Ministerio de Salud bonaerense de realizar acciones de difusión advirtiendo sobre la presencia de opioides en el mercado; una estrategia alineada con lo que debería realizar un SAT.
La acción informativa es una novedad a nivel público y hasta ahora fueron dos las alertas que publicó la cartera sanitaria bonaerense: una sobre la cocaína adulterada en 2021 y otra sobre la pastilla adulterada EA Sports que circuló el año pasado. Las alertas no se publicaron en canales institucionales oficiales, sin embargo MATE pudo confirmar que fueron emitidas por la cartera sanitaria.
En concreto, la de 2021 fue una alerta epidemiológica para los equipos de salud, que sirvió de herramienta para unificar un diagnóstico presuntivo y recomendar un tratamiento efectivo para evitar más muertes. También se publicaron volantes informativos con recomendaciones a personas que pudieran estar expuestas a la sustancia adulterada, que fueron difundidos por redes sociales y medios digitales de comunicación no oficiales.
Las recomendaciones a la población fueron:
- Evitar el consumo de cocaína adquirida en las últimas 24 horas desde la detección de los primeros casos.
- En caso de haber ingerido cocaína en cualquiera de sus formas en las últimas 24 horas, prestar atención a la aparición de síntomas adversos.
- Acompañar a cualquier persona usuaria de drogas que necesite atención médica, sin juzgar ni estigmatizar.
2 respuestas
Excelente artículo muchas gracias
Gracias a vos por tu comentario!